TOLERATE IT! - LA INDUSTRIA MUSICAL ES MACHISTA
- POLITIKUM
- 18 may 2022
- 4 Min. de lectura
Actualizado: 19 may 2022

Taylor Swift, Billboard Women Awards speech 2019
Por Macarena Rubio Freire
Ser hombre o ser mujer es la primera variabilidad que tenemos en nuestras vidas, de esto se deriva cómo nos manejaremos en un futuro, qué colores nos gustarÔn, qué tipo de ropa utilizaremos y, por supuesto, qué música estÔ hecha especialmente para nosotros. Durante años, la industria musical ha sido dirigida por y para hombres; esto se demuestra en la diferencia porcentual que existe entre hombres y mujeres dentro de la misma. En la actualidad, las diferencias son menos notorias; sin embargo, existe aún un largo camino por recorrer para llegar a un verdadero equilibrio e igualdad, empezando por el uso correcto del lenguaje, el cual cuando se trata de arte, cambia dependiendo del género del artista.
Si se habla históricamente, la mĆŗsica ha sido inherente al ser humano. No obstante, en determinadas Ć©pocas solo se podĆa admitir que una mujer tocara el piano o el violĆn en busca de que se vea como dotada o virtuosa, dĆ”ndole un toque aĆŗn mĆ”s sexista al hecho de que dominara el canto o el piano, puesto que la hacĆa ver como un mejor prospecto para el matrimonio. Por el contrario, en caso de querer componer mĆŗsica, la mujer debĆa utilizar pseudónimos, apoyarse en los nombres de sus padres o hermanos para que sus obras puedan salir a la luz o incluso mandarlas como autor anónimo. En 1686 el Papa Inocencio XI declaró: "La mĆŗsica es totalmente daƱina para la modestia que corresponde al sexo femenino, porque las mujeres se distraen de las funciones y las ocupaciones que les corresponden... Ninguna mujer... con ningĆŗn pretexto debe aprender mĆŗsica (ni)... tocar ningĆŗn tipo de instrumentoā.
āEn los Ćŗltimos 10 aƱos, he visto cómo las mujeres en esta industria son criticadas y comparadas entre si en función de sus cuerpos, sus vidas amorosas y forma de vestirā. Taylor Swift
SegĆŗn Forbes, en la industria musical los hombres ocupan el 70%, mientras que las mujeres tienen una participación del 30% y tienden a ser ignoradas, mal pagadas, hiper ā sexualizadas y obtienen menos rotación en las distintas plataformas musicales (Jarrin, 2021). Esto no es todo, a parte de las variaciones en ganancia y representación, la industria musical presenta terribles diferencias con respecto al lenguaje utilizado hacia hombres y el lenguaje que se utiliza hacia las mujeres; empezando con palabras como āestrategia y manipulaciónā y terminando con āexitoso y suertudaā. SegĆŗn Music Business Worldwide (MBW), las mujeres en la industria musical ganan apenas 82 centavos por cada dólar que gana un hombre, y si se trata de una mujer de color, la paga es aĆŗn menor. AdemĆ”s, MBW analizó la brecha salarial de las principales empresas de la industria musical como: Universal Music Group, Warner Music Group, Spotify, Sony Music y Live Nation; en donde reportaron diferencias salariales de hasta un 30% entre ejecutivos hombre y mujeres en las disqueras, por ejemplo: la paga por hora de trabajo en Live Nation es de casi 50% mĆ”s baja para mujeres, y en Spotify, las mujeres reciben casi un 20% menos de bonos que los hombres.
"Se puede decir que Taylor Swift no es parte de la industria musical, sino que ella ES la nueva industria musical".
A pesar de que los esfuerzos para combatir el machismo se han intensificado, la industria musical estĆ” todavĆa sumida en la desigualdad. Artistas icónicos como Taylor Swift lo han reiterado no solo por medio de redes sociales, sino tambiĆ©n en entrevistas e incluso a travĆ©s de su propia mĆŗsica. En el caso especĆfico de Swift, como artista independiente, se ha levantado en contra del sexismo al que se enfrenta todo el tiempo y lo vemos en los siguientes ejemplos:
En su sĆ©ptimo Ć”lbum denominado āLoverā existe una canción completa que se llama āThe Manā, esta canción hace referencia a cómo para las personas del gĆ©nero masculino se facilitan los caminos y objetivos por el simple hecho de ser hombre. The Man expresa la desconformidad de Swift con el hecho de que no se tome en cuenta el talento o la capacidad que cualquier persona tiene, sino el gĆ©nero que la persona profese; y ademĆ”s habla del variable discurso que el mundo maneja para referirse a las mujeres.
En relación a la idea anterior, la variabilidad de los discursos tambiĆ©n han sido tema de conversación para Swift, quien habló expresa y directamente de esto en su discurso cuando quedó como āMujer de la DĆ©cadaā en los Billboard Women Music Awards: āEn los Ćŗltimos 10 aƱos, he visto cómo las mujeres en esta industria son criticadas y comparadas entre sĆ en función de sus cuerpos, sus vidas amorosas y forma de vestirā. Definitivamente, la comparación es la mejor arma que posee el machismo para que las mujeres no peleen en su contra, pues se dedican a pelear entre ellas.
Durante una entrevista en televisión, Taylor Swift habló de las diferencias lingüĆsticas que se ocupan entre hombres y mujeres āsi un hombre hace algo inteligente se le califica como āestratĆ©gicoā, si lo hace una mujer entonces es ācalculadoraāā expresó la cantante.
La forma en que Taylor Swift visibiliza el machismo en la industria musical ha marcado un antes y un despuĆ©s. La cantante americana se ha convertido en un sĆmbolo de la no distinción entre hombres y mujeres; lo que ha hecho que sea valorada no solamente por su mĆŗsica, sino por el discurso dentro de la industria. Actualmente tiene igual o mĆ”s reproducciones, clicks y likes que muchos artistas hombres, ademĆ”s de que sus ganancias han incremendado en relación a los grandes artistas masculinos actuales. Por lo tanto, se puede decir que Taylor Swift no es parte de la industria musical, sino que ella ES la nueva industria musical.
Finalmente, que si bien Taylor Swift ahora es la cabeza de un movimiento en pro de los derechos de las mujeres en la industria musical, no ha sido la Ćŗnica cantante mujer que ha tenido que sufrir la crudeza y dureza de la misma, sino que representa a todas las mujeres que han pasado por ella. Se puede decir que, gracias a su valentĆa y defensa por oportunidades equitativas, la industria musical estĆ” cambiando, aunque aĆŗn a paso lento, pero cambiando permanentemente.